Expresidente peruano pide a jueces reflexionar sobre su encierro
El expresidente peruano Ollanta Humala pidió hoy a los jueces de la Corte Suprema reflexionar sobre su encierro y el de su esposa, Nadina Heredia, en días previos a la decisión de ese tribunal sobre una apelación de la pareja contra la carcelería.
En un artículo difundido por el diario La República, Humala apela 'a la conciencia jurídica de sus magistrados' en torno a la medida de prisión preventiva que sufren el exgobernante y su esposa. Los Humala-Heredia fueron sometidos en julio pasado, dentro de una investigación por supuesto lavado de activos, a prisión preventiva por 18 meses, medida cuestionada por la mayoría de los juristas y analistas políticos que la consideran injustificada. La carta cita lo que Humala considera logros de su gobierno, los que afirma serán comprendidos serenamente con el paso de los años y así sucederá 'con muchas de las investigaciones fiscales que ahora se promueven por venganza política'. En esas pesquisas, dice, en obvia alusión a su caso, 'parecen perdidos o seriamente disminuidos el derecho a la presunción de inocencia, a un proceso justo y a la libertad, que se supone caracterizan a un Estado Democrático de Derecho'. Humala se refiere también al caso de sobornos de empresas brasileñas en Perú, que golpea a diversos políticos, y sus características de uso de empresas de fachada, paraísos fiscales y testaferros para pago de sobornos. 'Nada de esto existe en nuestra investigación, a nosotros nos investigan por supuestos aportes de campaña electoral, de una empresa privada cuando no teníamos ningún cargo público', añade sobre la acusación de que recibió fondos de la empresa brasileña Odebrecht, que esta admite y Humala niega. Expresa la convicción, compartida por la opinión pública, de que hay un trato diferenciado, pues los Humala-Heredia son encarcelados sin sentencia pese a que afrontaron a la justicia, pero no los investigados por el caso de los sobornos brasileños, 'Las condiciones carcelarias siempre son duras, sobre todo cuando el encierro nace de un abuso de poder y no de un acto probadamente ilícito', añade, al criticar la medida de prisión preventiva por convertirse en una condena anticipada, sin el derecho a la presunción de inocencia. Humala alega también que él y su esposa se sujetaron a las reglas de la justicia, sin dar motivo para la prisión preventiva y señala entre las irregularidades de su caso las amenazas y presiones políticas a la justicia contra la pareja. 'La prisión preventiva se ha convertido en el instrumento perverso para hacer escarnio y aplacar la sed de venganza de quienes ahora toman café en Madrid, y tienen a toda una embajada (con embajador incluido) a su entero servicio', agrega. Alude así tácitamente al expresidente neoliberal Alan García, radicado en Madrid e investigado por lavado de activos, y al embajador de Perú en España, José García Belaúnde, su amigo y su canciller en los cinco años de su último gobierno (2006-11). '¿Es ético permitir que el titular de nuestra legación en España siga recibiendo información reservada de los bancos de Andorra antes de que esta llegue a nuestras autoridades judiciales?', pregunta Humala, aludiendo al hecho que en Andorra están las cuentes de sobornos pagados por Odebrecht a funcionarios del gobierno de García.