Conoce el Año Nuevo islámico 'Hijrī': sus raíces y cómo se conmemora

El Año Nuevo Islámico marca el inicio del primer mes del calendario lunar musulmán, conocido como Hijrī. Aunque la mayoría de los países islámicos siguen el calendario gregoriano solar, el calendario lunar se utiliza para determinar las fechas de festividades religiosas y celebraciones importantes, como la peregrinación del Hayy. Debido a que el Hijrī se basa en los movimientos de la luna, consta de solo 354 o 355 días, lo que lo hace aproximadamente 11 días más corto que el calendario gregoriano de 365 días (o 366 en años bisiestos).

Fue Umar I, el segundo califa musulmán, quien en el año 639 d.C. estableció este calendario como parte de un esfuerzo más amplio por estandarizar y organizar la vida con las tradiciones islámicas. Además, buscaba diferenciarlo de los calendarios utilizados por otras religiones.

En el pasado, en Irán, los musulmanes chiítas lloraban la muerte de Husayn ibn Ali, nieto del profeta Mahoma, quien falleció en la batalla de Karbala en el año 680 d.C.

El punto de partida del calendario Hijrī se estableció en el verano del año 622 d.C., que marca la migración del profeta Mahoma y sus seguidores desde La Meca a Medina para escapar de la persecución religiosa. Esta migración, conocida como Hijrah o Hégira, es considerada ampliamente como el inicio del Islam como religión organizada, y como de una institución política.

Aunque el calendario Hijrī tiene un punto de partida definido, el comienzo de sus meses puede variar según la región, ya que se basa en la primera aparición de la luna creciente.

Durante el mes de Muharram, que significa "prohibido" en árabe, los musulmanes de todo el mundo conmemoran este período sagrado con oraciones y tiempo en familia. Sin embargo, las dos principales sectas islámicas, chiítas y suníes, observan el primer mes de manera diferente debido a eventos históricos relacionados con la muerte de Husayn Ibn Ali.

Los musulmanes chiítas guardan 10 días de luto al comienzo del mes, culminando con el día de Ashura, en el que lloran la muerte de Husayn. Algunos participan en marchas de luto, mientras que otros se autoflagelan como forma de conmemorar su sufrimiento. Por otro lado, los musulmanes suníes también observan el día de Ashura con ayuno y oración, pero en honor a un ayuno realizado por Mahoma en Medina después de su emigración.

Durante el mes de Muharram, se llevan a cabo comidas conmemorativas en diferentes partes del mundo, como el arroz especial con azafrán compartido en Garmsar (Irán) y el doodh ka sharbat, una bebida láctea consumida en Hyderabad (India) en memoria de la sed sufrida por Husayn y sus seguidores durante la batalla.

A diferencia de las festividades tradicionales del Año Nuevo, Muharram no es una época de celebraciones ostentosas, sino más bien un año de reflexión y recuerdo para aquellos que lo celebran. El Año Nuevo Hijrī es un recordatorio anual del paso del tiempo, de la basta historia del Islam y de la resistencia del pueblo musulmán frente a las adversidades.

Aunque no se caracteriza por llamativas celebraciones o fuegos artificiales, el significado profundo de Muharram perdura en los corazones de quienes lo conmemoran. Es un momento para contemplar la importancia de la fe, la unidad y la perseverancia en medio de los desafíos.

Muharram nos invita a reflexionar sobre los valores fundamentales del Islam y a recordar los sacrificios realizados por los líderes y seguidores de esta fe. Además, nos anima a mantener viva la memoria de aquellos eventos históricos que han dado forma a la comunidad musulmana y a buscar la paz y la armonía en nuestra vida diaria.